Es una planta de cultivo extremadamente fácil. Solo requiere un suelo bien drenado con abundante materia orgánica. Agradece el abonado siempre con moderación, especialmente con abundancia de Nitrógeno, que favorece el crecimiento exuberante tan atractivo del género. Es muy recomendable regar con frecuencia, aunque si no lo hacemos la planta, dado su carácter suculento, resiste perfectamente la falta de agua durante largos periodos, aunque perderá todo su atractivo durante el estrés hídrico. Dado su carácter rastrero y expansivo, agradece podas para darle algo de forma y contenerla en su terreno evitando que invada todo el sitio disponible.

Es una planta realmente fácil de multiplicar. Es posible su reproducción por semillas, especialmente si queremos obtener ejemplares no clónicos, pero en general se suelen usar esquejes. Gracias a su tremendo vigor es fácil el esquejado casi en cualquier época o circunstancia.

Prácticamente no hay plagas que le afecten seriamente. Algunos devoradores como los gusanos y saltamontes, aunque los efectos son más visuales que reales. Si observamos que algunas hojas han sido devoradas tendremos que aplicar cualquier insecticida apropiado.